Me niego a negarme.
Me niego a negarme.
A creer que soy producto de subproductos
como una lata que se caen de los estantes.
Me niego a negarme porque corro como el viento
y en mi pecho golpea la sangre.
En la teoría y en la práctica,
me opongo a no oponerme.
A cerrar los ojos a la luz que dispara la mañana.
A callar cuando tengo que gritar.
A bajar la cabeza,
Me niego.
Me niego a aceptar lo que otros quieren que acepte.
Me niego al silencio porque soy fuerza
Soy río, y mil ríos corren por mis venas.
Me niego a dormir sin soñar.
Me niego, como todo, a desvanecerme,
a hacerme gris, a cortarme la lengua.
Y me importa poco el resto.
En resumidas cuentas,
me niego a negarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario